El juego de la Casita Robada es una divertida actividad que se juega con cartas españolas o francesas. En este juego, los jugadores deben robar casitas de otros jugadores para acumular la mayor cantidad posible y ganar. A continuación, te explicaremos cómo se juega y algunas variantes que puedes probar.
Cómo jugar a la Casita Robada
Para comenzar a jugar a la Casita Robada, se reparten tres cartas a cada jugador y se colocan cuatro cartas sobre la mesa. En cada ronda, los jugadores tienen la oportunidad de robar cartas de la mesa que tengan el mismo número que las suyas. Por ejemplo, si hay un 4 de bastos en la mesa, un jugador puede robarlo si tiene otro 4 o un comodín. Sin embargo, robar cartas no es obligatorio y los jugadores pueden decidir no hacerlo si así lo desean.
Después de robar o decidir no hacerlo, los jugadores van tirando una carta por turno hasta que se acaben las tres cartas de esa ronda. Si un jugador no tiene ninguna carta para levantar en su turno, debe tirar una carta sobre la mesa. Las cartas robadas se dejan apiladas al lado del jugador que las ha cogido, con la numeración hacia arriba para que los contrincantes puedan verlas. Si otro jugador tiene una carta que coincide con la casita robada, puede robarla.
El juego continúa de esta manera hasta que se acaben todas las cartas. El jugador que haya acumulado la mayor cantidad de casitas al final del juego es el ganador. Cabe destacar que los comodines no se pueden tirar sobre otros comodines.
Variantes de la Casita Robada
La Casita Robada tiene diferentes nombres y variantes en distintas regiones. En el sur de España, se conoce como el ladrón, mientras que en Sudamérica se le llama roba paquete o nadie sabe para quién trabaja. En Centroamérica, es conocido como casino robado. En Argentina, también se le llama quita montón, roba montón, ronda o pinche. En Venezuela, algunos ciudadanos le llaman roba pilón.
Cómo se juega a la Cola Sucia
Otro juego de cartas similar a la Casita Robada es la Cola Sucia. En este juego, el objetivo es deshacerte de todas las cartas que tienes en la mano. A continuación, te explicaremos cómo se juega a la Cola Sucia y algunas variantes regionales.
Para comenzar a jugar a la Cola Sucia, un jugador esconde una carta al azar debajo de su glúteo sin que nadie la vea. Luego, se reparten 12 cartas a cada jugador y cada uno debe formar parejas de números iguales con las cartas que tiene en la mano. No importa la pinta de las cartas, solo deben tener el mismo número. Después, los jugadores van sacando una carta del mazo por turno y siguen formando parejas con esas cartas.
Una vez que se acaban las cartas del mazo, los jugadores deben quitarse una carta por turno sin que los demás jugadores la vean. El jugador que se queda sin poder hacer la última pareja, es decir, aquel que tiene la carta que se escondió al principio, es el ano sucio y recibe golpes de pierna de sus compañeros. Si todos los jugadores quedan con una carta, el que tenga la carta elegida perderá.
Variantes de la Cola Sucia
En Chile, Uruguay, Paraguay y Argentina, se juega de manera similar a la versión original. Sin embargo, se reserva una carta del trasero al comienzo del juego. Cada jugador descarta los pares de números y los deja sobre la mesa, sin importar si se ven o no. En cada ronda, los jugadores toman una carta del jugador que tienen a su derecha. Si consiguen un par de números iguales, lo descartan y la ronda continúa. El jugador que se queda con una carta sin par es el culo con gusanos y pierde el juego.
En Ecuador y Perú, se considera al As de Picas como el ano sucio. Se reparten todas las cartas entre los jugadores y un jugador comienza lanzando algunas de las cartas que tiene en su mano. Si no tiene la carta siguiente en el palo, debe pedirle al jugador de su derecha que tome una carta al azar. El objetivo es quedarse sin cartas, y se pierde si se conserva el As de Picas hasta el final. En esta variante, se considera trampa esconder cartas, pero se permite sujetar las cartas importantes con los pulgares y dejar las malas a la vista.
En Alemania, el juego se juega tradicionalmente con una baraja de naipes particulares que incluye varios pares y una carta única llamada Schwarzer Peter. El objetivo es seguir tomando cartas y descartando pares hasta que todos los jugadores, excepto uno, se queden sin cartas. El jugador que se quede con la última carta sin pareja recibe un punto negro en la nariz, frente o mejilla.
La Casita Robada y la Cola Sucia son juegos de cartas divertidos y emocionantes que pueden disfrutarse con amigos y familiares. Ambos juegos requieren estrategia y habilidad para robar casitas o deshacerse de las cartas en el menor tiempo posible. Ya sea que juegues a la Casita Robada o a la Cola Sucia, ¡seguro pasarás momentos llenos de risas y diversión!
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