Los juegos y juguetes son una parte importante de la historia y la cultura de diferentes civilizaciones alrededor del entorno. En este artículo, nos adentraremos en el entorno de los juegos de Grecia y exploraremos los emocionantes Juegos Nemeos. Estos juegos eran una de las cincuenta competiciones deportivas panhelénicas que se llevaban a cabo en la antigua Grecia, específicamente en la región de Nemea en la Argólide.
Características de los Juegos Nemeos
Los Juegos Nemeos se celebraban junto al santuario de Zeus Nemeo, que aún cuenta con algunas columnas en pie y los restos de un bosque sagrado de cipreses. Estos juegos tenían lugar cada dos años durante el verano, en el segundo y cuarto año de la olimpiada. Después de la conquista romana de Grecia, también se mencionan unos Juegos Nemeos de invierno, aunque se desconoce si se alternaban con los de verano o eran eventos separados.
El programa de los juegos incluía competiciones hípicas, atléticas (carreras, pentatlón, pancracio, pugilato, lucha) y artísticas. Había tres categorías de competidores: niños, jóvenes y adultos. Durante las celebraciones de los juegos, la afluencia de público era masiva, con el estadio de época helenística siendo capaz de albergar hasta 40.000 espectadores. En sus inicios, los juegos eran de naturaleza fúnebre y los jueces vestían de luto, utilizando el color negro.
Los vencedores de los Juegos Nemeos eran recompensados con una corona de apio silvestre fresco. Esta corona era un símbolo de honor y reconocimiento por su logro deportivo.
Historia mítica de los Juegos Nemeos
Existen dos versiones míticas sobre el origen de los Juegos Nemeos. Según una de ellas, se instituyeron como recuerdo de una de las doce pruebas de Heracles. El león de Nemea aterrorizaba a los habitantes de la región hasta que Heracles lo capturó y estranguló.
En la versión más conocida, los juegos están relacionados con la historia de los Siete contra Tebas y el trágico destino del pequeño Ofeltes, también conocido como Arquémoro. Según la leyenda, Polinices, el hijo de Edipo, junto a otros seis jefes, se rebelaron contra Tebas. Durante su expedición, llegaron a Nemea sedientos y se encontraron con Hipsípila, quien llevaba al pequeño Ofeltes en brazos. Hipsípila los condujo a un manantial, pero dejó al niño en una plantación de apio, donde fue atacado y muerto por una serpiente. Los Siete, al regresar y descubrir la tragedia, mataron a la serpiente y establecieron los Juegos Nemeos en honor a Ofeltes.
Los Juegos Nemeos eran una forma de honrar y recordar la tragedia que rodeó a la expedición de los Siete contra Tebas. Los atletas solo competían por una corona, ya que los Siete no estaban interesados en entregar premios. Sin embargo, prometieron organizar competiciones con premios valiosos a su regreso. Al principio, la corona estaba hecha de ramas de olivo, pero más tarde se confeccionó con apio tierno.
Historia de los Juegos Nemeos
Los registros indican que los Juegos Nemeos fueron fundados en el 1251 a.C., aunque las competiciones se consideran panhelénicas a partir del 573 a.C. Durante el periodo helenístico, se añadieron competiciones musicales al programa de los juegos. A partir del siglo I a.C., las mujeres también pudieron participar en los juegos.
La ciudad de Cleonas fue la encargada de organizar los juegos desde sus inicios. Sin embargo, en algún momento del siglo IV a.C., el control de los juegos pasó a Argos. En el año 330 a.C., se construyó el templo de Zeus y los juegos fueron reinstaurados en Nemea hasta alrededor del 270 a.C., momento en el que volvieron a ser organizados en Argos. En 235 a.C., Arato de Sición organizó unos juegos alternativos en Nemea, lo que resultó en una grave violación de la paz sagrada.
En 145 a.C., durante la invasión romana, los juegos fueron celebrados en Nemea por orden del tribuno militar Lucio Mumio. Sin embargo, algunos años después, los juegos quedaron definitivamente bajo el control de Argos.
Cuando el historiador Pausanias visitó Nemea a principios del siglo II, el santuario ya estaba en ruinas. El techo del templo de Zeus Nemeo se había derrumbado y no quedaba ninguna imagen en su interior.
Arqueología de los Juegos Nemeos
Uno de los aspectos más maravillosos de los Juegos Nemeos es el túnel de 36 metros de largo por el cual los atletas y los jueces accedían al estadio. Se cree que este túnel era utilizado por los atletas para desvestirse y mientras esperaban, pintaban las paredes con inscripciones. Algunas de estas inscripciones incluyen la palabra niko que significa gano y también se han encontrado inscripciones eróticas y divertidas.
A lo largo de los años, se han realizado esfuerzos por recuperar los Juegos Nemeos. Desde 1996, se han celebrado los Juegos Nemeos modernos cada cuatro años, tratando de seguir las costumbres y tradiciones de la antigua Grecia. Estos juegos atraen a participantes de numerosos países, quienes compiten descalzos y vestidos con túnicas. Como premio, los ganadores reciben una corona de apio y una rama de palmera.
Los Juegos Nemeos son una parte maravilloso de la historia y la cultura de la antigua Grecia. Estos juegos eran una celebración de la competencia atlética y artística, así como un tributo a la trágica historia de los Siete contra Tebas y el pequeño Ofeltes. A través de los esfuerzos de recuperación, los Juegos Nemeos han vuelto a la vida en la forma de los Juegos Nemeos modernos, permitiendo a los participantes experimentar una pequeña parte de la emoción y la grandeza de los antiguos juegos.
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